Se sumergen las antxoas en agua muy fría con sal y hielo durante unos 10 minutos.
Se mezcla enérgicamente el vinagre con el agua y con la sal hasta que la sal se ha diluido del todo. Y en esa mezcla se sumergen las antxoas durante 2 horas, empezarán a marinar en seguida.
Se aclaran un poco por agua para retirarles el exceso de vinagre y se introducen en el aceite junto con los ajos y el perejil finamente picados.
Se guarda tapado en el congelador durante 72 horas. Para evitar la contaminación por anisakis, si los hubiera. Después se deja descongelar en el frigorífico respetando la cadena del frío. ¡Y a comer!
On egin!